Cómo instalar campana extractora industrial de forma adecuada

Instalar una campana extractora industrial no es solo un trámite técnico, es casi una declaración de intenciones. Porque cuando alguien decide abrir un restaurante, un bar o cualquier espacio donde se cocine con alma y con fuego, lo que hay detrás del humo es vocación, es pasión. Pero atención, que no basta con la buena voluntad. Aquí lo que hace falta es método, precisión y, sobre todo, conocimiento. No se trata de poner un simple extractor y a correr, sino de saber lo que uno está haciendo. Así que póngase cómodo, que vamos al grano, como nos gusta a los que hablamos claro.

Por qué son imprescindibles las campanas extractoras industriales

En cualquier cocina profesional que se precie, las campanas extractoras industriales son un pilar fundamental. No solo por normativa —que también—, sino porque sin ellas el aire se vuelve irrespirable, la grasa se pega a las paredes como testigo silente del trajín diario, y el humo lo invade todo como si estuviéramos en pleno incendio. Y eso, ni es seguro, ni es saludable, ni es digno de un establecimiento que se toma en serio lo que hace.

Una campana extractora industrial no se instala por capricho. Se coloca para extraer eficazmente humo, vapor, partículas de grasa y olores, evitando así que el ambiente se vuelva una sauna grasa. Además, los modelos modernos filtran y expulsan el aire purificado, manteniendo la atmósfera laboral limpia y oxigenada. A mayor rendimiento culinario, mayor necesidad de extracción. Así de simple.

Aspectos clave para instalar una campana extractora industrial

Vamos por partes, como en la cocina clásica. Lo primero es contar con la autorización expresa —y aquí no hay debate— de la comunidad de propietarios si estamos hablando de un edificio compartido. No se puede perforar alegremente la fachada sin el visto bueno de los vecinos. Esa autorización debe ser unánime y por escrito. No hay atajos.

Una vez conseguido el beneplácito de la comunidad, hay que analizar el diámetro del tubo de salida de humos. Este debe adecuarse al volumen de aire que va a desplazar la campana, y eso se calcula en función del tamaño del local y la potencia de los equipos de cocción. Es más, el tubo de salida debe ser lo más recto y corto posible, para evitar pérdidas de presión. Cada codo, cada metro de más, es una zancadilla al rendimiento.

Pero lo más importante: la campana extractora industrial debe cubrir todo el frente de cocción, dejando un margen lateral mínimo de 15 centímetros. Es recomendable que la campana sea más ancha que la zona de fuegos. Si puede ser más grande, mejor. La potencia necesaria se calcula multiplicando los metros cúbicos de la cocina por 12 (o por 15 si es campana tipo isla). Así nos aseguramos de que el aire se renueva las veces que hacen falta por hora.

Tipos de campanas extractoras industriales y su adaptación a cada cocina

Existen diferentes tipos de campanas extractoras industriales, y cada una tiene su espacio y función. Las de succión directa son muy eficaces, y perfectas para cocinas que generan un volumen importante de humo. Las de recirculación, que filtran el aire y lo devuelven al ambiente, pueden ser útiles en espacios sin posibilidad de salida al exterior, pero son menos eficaces. En cocinas profesionales, lo recomendable es una instalación con extracción exterior.

Para más detalles técnicos sobre sistemas avanzados de seguridad, recomendamos consultar esta guía especializada en sistemas de extinción automática para cocinas industriales:
Sistema de extinción automática en cocina

La instalación debe respetar siempre unas distancias mínimas: entre 65 y 75 cm si es una campana mural, y entre 140 y 160 cm si es de techo. Además, debe garantizarse una entrada de aire suficiente para que el sistema funcione correctamente. Sin aire que entre, no hay aire que salga. Eso es física elemental, no cocina molecular.

Materiales, limpieza y mantenimiento: la clave para una larga vida útil

Aquí no hay espacio para el plástico ni para materiales que no resistan la guerra diaria de una cocina. El acero inoxidable es el rey absoluto. Duro, resistente, fácil de limpiar y apto para productos químicos agresivos. Porque una cocina profesional no puede darse el lujo de acumular grasa en las superficies o en los motores.

La limpieza de la campana no es negociable. Los filtros deben revisarse y limpiarse al menos una vez al mes, y el sistema de extracción, una vez al año como mínimo. Si no lo hacemos, la grasa se acumula, el extractor pierde eficacia y aumentamos el riesgo de incendio. Y eso, amigo lector, no lo cubre ninguna receta.

Hay que evitar productos abrasivos, lejía o estropajos metálicos. El agua debe estar a temperatura adecuada, y si notamos que la campana ya no extrae como antes, probablemente sea hora de cambiar los filtros. Más vale prevenir que lamentar.

Errores frecuentes al instalar campanas extractoras industriales

  1. Elegir una campana más pequeña que la zona de cocción. Error grave. Siempre debe cubrir por completo la superficie de cocinado.

  2. Tubos demasiado largos o con muchos codos. Cada curva resta potencia.

  3. Motores de baja calidad. Si no son de hierro blindado, estamos tirando el dinero.

  4. No prever entradas de aire. Si no entra aire, la extracción no funciona.

  5. No respetar las distancias mínimas de instalación. Por estética o por falta de información, se colocan demasiado cerca o demasiado lejos, reduciendo la eficacia.

Consejos finales para una instalación profesional y segura

  • Confía en instaladores certificados. Este no es un trabajo para manitas del domingo.

  • No escatimes en filtros de calidad. Son la primera barrera contra la grasa.

  • Revisa la normativa local. Algunas comunidades autónomas tienen requisitos específicos.

  • Instala iluminación integrada en la campana para mejorar la visibilidad sobre los fogones.

  • Asegúrate de que el sistema sea compatible con otros dispositivos de seguridad como sensores de incendio o extintores automáticos.

Una cocina que huele a limpio es una cocina que inspira confianza. Una campana extractora industrial bien instalada no solo mejora la ventilación: protege al personal, cumple la ley y da prestigio a tu negocio. Así que ahora ya lo sabes. Si vas a cocinar en serio, que el humo no te tape la vista. Equípate como se debe, porque hasta el mejor chef necesita un buen extractor.