Los tipos de extintores más comunes en oficinas

Los tipos de extintores más comunes en oficinas: protección real contra incendios

En la actualidad, la protección contra incendios en oficinas no es un lujo ni una formalidad, sino una necesidad crítica. Aunque estos espacios se perciben como de bajo riesgo, albergan gran cantidad de materiales inflamables: papel, mobiliario, equipos electrónicos, cableado y productos de limpieza. Ignorar la correcta elección y ubicación de los extintores puede tener consecuencias graves tanto para la seguridad del personal como para la continuidad del negocio.

Contar con el extintor de incendios adecuado no solo garantiza el cumplimiento de la normativa vigente, sino que también protege instalaciones y personas frente a situaciones que pueden volverse catastróficas en cuestión de segundos.

La importancia de elegir correctamente el extintor en oficinas

Un error común es asumir que todos los extintores de incendios sirven para cualquier tipo de incendio, una creencia que puede agravar el riesgo. Usar un agente inadecuado puede:

• Aumentar la propagación del fuego.
• Generar riesgos eléctricos peligrosos.
• Dañar equipos informáticos y electrónicos de alto valor.
• Impedir una extinción rápida y segura.

La normativa europea clasifica los incendios en distintas categorías:

• Clase A: Materiales sólidos como papel, madera, telas y plásticos.
• Clase B: Líquidos inflamables como pinturas, aceites y disolventes.
• Clase C: Gases inflamables.
• Clase D: Metales combustibles.
• Clase F: Aceites vegetales y grasas de cocina.

En oficinas, los incendios de clase A y los riesgos eléctricos son los más frecuentes, por lo que la elección de extintores se centra en modelos polivalentes y específicos para equipos electrónicos sensibles.

Tipos de extintores más utilizados en oficinas

Extintor de polvo ABC: el estándar en oficinas

El extintor tipo ABC es el más común en entornos administrativos por su capacidad de cubrir las tres clases de fuego más habituales:

• Clase A: Papel, archivos, mobiliario.
• Clase B: Líquidos inflamables de limpieza.
• Clase C: Gases en instalaciones auxiliares.

Ventajas:

• Alto poder de extinción.
• Precio accesible.
• Mantenimiento sencillo.
• Uso rápido incluso por personal sin formación.

Limitaciones:

• Deja residuos que pueden afectar equipos informáticos.
• Menor eficacia en incendios exclusivamente eléctricos.

Aplicación ideal: áreas comunes, pasillos, almacenes de material de oficina, zonas sin aparatos electrónicos delicados. Por eso, es importante saber los tipos de extintores más comunes en oficinas.

Extintores de CO2: protección para equipos electrónicos

El extintor de dióxido de carbono es imprescindible en zonas técnicas de oficinas modernas:

• Salas de servidores y CPDs.
• Cuadros eléctricos y centros de datos internos.
• Áreas con fotocopiadoras y ordenadores.

Ventajas:

• No deja residuos y protege equipos electrónicos.
• Sofoca el fuego al desplazar el oxígeno.
• Previene la propagación de incendios eléctricos.

Limitaciones:

• No es efectivo en incendios de materiales sólidos profundos.
• No enfría los objetos inflamados.
• Uso limitado en espacios abiertos.

Aplicación ideal: puestos TIC, racks informáticos, despachos tecnológicos y salas eléctricas.

Extintores de agua pulverizada con aditivos

Menos frecuentes, pero altamente recomendables para fuegos de clase A. Son ideales para oficinas con archivos físicos, bibliotecas internas y salas de reuniones con gran volumen de papel.

Ventajas:

• Ecológicos y no tóxicos.
• Alta capacidad de enfriamiento.
• Presentaciones compactas y fáciles de manejar.

Limitaciones:

• No aptos para incendios eléctricos activos.
• Prohibidos en presencia de líquidos inflamables.

Extintores de espuma

La espuma AFFF ofrece eficacia frente a fuegos de clase A y B, siendo cada vez más habitual en oficinas con riesgos químicos leves.

Ventajas:

• Poder de enfriamiento y sofocación simultánea.
• Minimiza el riesgo de reencendido.
• Residuos fáciles de limpiar.

Limitaciones:

• No aptos para fuegos eléctricos activos.
• Precio superior al polvo ABC.

Aplicación ideal: áreas administrativas con riesgo químico leve y almacenamiento de líquidos de limpieza.

Normativa sobre extintores en oficinas en España

El RIPCI establece reglas precisas para la instalación y mantenimiento de extintores en oficinas:

• 1 extintor por cada 15 metros de recorrido, con cobertura máxima de 100 m² por unidad.
• Ubicación visible y señalizada.
• Altura máxima de instalación: 1,70 m desde el suelo al mango.
• Mantenimiento anual obligatorio por empresa autorizada.
• Retimbrado obligatorio cada 5 años.

En la práctica:

• Oficinas pequeñas: mínimo 1 extintor ABC.
• Oficinas medianas o grandes: combinación de ABC + CO2.
• Zonas TIC: siempre extintor de CO2.

Distribución recomendada de extintores en una oficina tipo

Capacidad adecuada de extintores para oficinas

• Extintor de 6 kg: estándar legal, equilibrio entre peso y poder de extinción, fácil manejo.
• Extintor de 2 kg: ideal para despachos pequeños y complemento del sistema principal.
• Extintor de 5 kg CO2: recomendado en CPDs y grandes salas técnicas.

Errores frecuentes al elegir extintores para oficinas

• Usar solo extintores ABC y omitir los de CO2.
• Instalar unidades sin señalización visible.
• Falta de formación básica al personal.
• Mantenimiento no certificado.
• Ubicación inaccesible o demasiado elevada.

Buenas prácticas de seguridad contra incendios

• Formación básica del personal en uso de extintores y evacuación.
• Simulacros periódicos para reducir el pánico y mejorar tiempos de reacción.
• Revisión constante de cableado eléctrico, evitando cortocircuitos.
• Extintores homologados, adquiridos solo en empresas acreditadas según CE y RIPCI.

Tendencias actuales: extintores ecológicos y de diseño

Muchos espacios modernos optan por extintores sin PFAS, diseños decorativos homologados y unidades compactas integradas en mobiliario técnico, sin comprometer nunca la seguridad ni la normativa.

Preguntas frecuentes sobre extintores en oficinas

¿Es obligatorio tener extintores en una oficina pequeña? Sí, todos los locales de trabajo requieren sistemas de primera intervención.

¿Cada cuántos años se cambia un extintor? Vida útil media: 20 años, con retimbrado cada 5.

¿Puede cualquier persona utilizar un extintor? Sí, siempre que haya recibido formación mínima en prevención y uso.

Inversión en seguridad y continuidad

Elegir correctamente los tipos de extintores más comunes en oficinas es una estrategia que combina cumplimiento legal, protección de activos y salvaguarda de vidas. La combinación equilibrada de extintores de polvo ABC y CO2, junto con señalización y mantenimiento correcto, proporciona cobertura completa frente a los riesgos reales del entorno laboral. La prevención efectiva no es un gasto: es la inversión más rentable para garantizar la continuidad de cualquier empresa.