¿Exigen las aseguradoras la instalación de sistemas certificados para protegerte del fuego en tu campana extractora? Guía técnica y legal sobre la protección contra incendios en cocinas profesionales
En los últimos años, las aseguradoras han incrementado de forma notable sus exigencias en materia de seguridad contra incendios en el sector de la hostelería. Restaurantes, hoteles, bares, caterings y cocinas industriales están obligados a reforzar sus sistemas de protección para evitar siniestros derivados de acumulación de grasa o fallos eléctricos. Dentro de estos requisitos, los sistemas de extinción automática certificados en campanas extractoras son hoy un pilar esencial para obtener o mantener la cobertura de una póliza.
A continuación, explicamos de forma detallada qué piden exactamente las compañías de seguros, qué normativa aplican y cómo puedes proteger tu negocio de un rechazo de indemnización en caso de incendio.
La ventilación profesional y el papel clave de la campana extractora industrial con motor
Un elemento crítico en la prevención de incendios es la campana extractora industrial con motor, pieza indispensable en toda cocina profesional moderna. Este tipo de campana no solo cumple una función de extracción de humos y vapores, sino que actúa como barrera preventiva ante la acumulación de grasa en el aire y los filtros.
Las aseguradoras consideran este componente un punto de alto riesgo, ya que más del 60% de los incendios en cocinas se originan precisamente en su interior o en los conductos conectados a ella. Por ese motivo, exigen que los locales cuenten con campanas certificadas, fabricadas en acero inoxidable y equipadas con motores encapsulados resistentes al calor. Además, deben estar asociadas a sistemas de extinción que cubran filtros, conductos y zonas de cocción.
Una campana extractora industrial con motor adecuada garantiza la correcta evacuación de los gases calientes y minimiza la posibilidad de propagación del fuego. En caso de inspección o siniestro, disponer de esta instalación es la primera prueba de cumplimiento técnico ante la aseguradora.
Exigencias de las aseguradoras y relevancia de la campana industrial con motor
Las compañías de seguros no dejan margen a la improvisación. Su principal objetivo es reducir el riesgo estructural y financiero de cada negocio asegurado. Por ello, solicitan la instalación de una campana industrial con motor que cumpla las normas UNE-EN 16282-7, UL300 o equivalentes, junto a un sistema automático de detección y extinción.
Entre los requisitos más habituales destacan:
- Certificación del sistema de extinción: debe estar homologado bajo normativa europea o estadounidense reconocida.
- Cobertura completa: protección activa de filtros, zona de cocción y conductos.
- Instalación profesional: realizada por empresa autorizada y registrada en el RIPCI (RD 513/2017).
- Mantenimiento anual documentado: revisión técnica sellada y registrada para conservar la validez de la cobertura.
El incumplimiento de cualquiera de estos puntos puede derivar en la reducción o anulación de la indemnización en caso de siniestro. Además, algunas aseguradoras condicionan la aceptación del contrato a la presentación de los certificados de instalación y mantenimiento actualizados.
Una campana industrial con motor no solo representa una inversión en seguridad, sino también una condición técnica indispensable para garantizar la vigencia del seguro de incendios o multirriesgo de hostelería.
Por qué exigen las aseguradoras la instalación de sistemas certificados
Tal vez te preguntes por qué exigen las aseguradoras la instalación de sistemas certificados para protegerte del fuego en tu campana extractora: Las aseguradoras exigen la instalación de sistemas certificados por tres motivos fundamentales: riesgo, normativa y trazabilidad.
El fuego en cocinas profesionales se origina, principalmente, por la acumulación de grasa en filtros, conductos y campanas. Cuando la temperatura supera los 400°C, esa grasa se inflama de forma espontánea y puede extenderse rápidamente por toda la instalación. Los sistemas de extinción automática, al detectar un aumento de temperatura, liberan agentes químicos o líquidos neutralizantes capaces de sofocar el fuego en segundos, evitando daños mayores.
Además, los sistemas certificados (UL300, UNE-EN 16282-7 o UNE 23510) garantizan eficacia demostrada sobre grasa caliente, condición indispensable para el cumplimiento del RIPCI y la UNE 23510. Las compañías aseguradoras revisan estos certificados para confirmar que el local está protegido con equipamiento válido y no con imitaciones sin ensayo técnico.
Finalmente, exigen documentación trazable, incluyendo el certificado del fabricante, la memoria técnica del instalador y los informes de mantenimiento anuales. Sin esa documentación, pueden rechazar total o parcialmente la indemnización incluso si el siniestro no fue causado directamente por negligencia.
Requisitos técnicos y legales de los sistemas de extinción automática
Las aseguradoras estructuran sus condiciones sobre la base de los reglamentos oficiales:
- RIPCI (RD 513/2017): regula el mantenimiento y la certificación de instalaciones contra incendios.
- UNE-EN 16282-7: norma europea específica para sistemas de extinción en cocinas profesionales.
- UNE 23510: define los requisitos para sistemas fijos de extinción.
- Certificación UL300: estándar norteamericano para rendimiento en presencia de grasa caliente.
Para cumplir con la cobertura del seguro, el sistema de extinción debe incluir:
- Boquillas en campana y zona de cocción.
- Detectores térmicos calibrados según caudal y temperatura.
- Botón de activación manual visible y accesible.
- Agente extintor químico o líquido homologado.
- Corte automático de gas y electricidad al activarse el sistema.
- Señalización conforme al RIPCI.
Solo las instalaciones ejecutadas por empresas registradas y certificadas son reconocidas por las aseguradoras. En caso contrario, la póliza puede declararse nula ante un siniestro.
Qué ocurre si no se cumple con las exigencias aseguradoras
No contar con sistemas certificados o mantenimiento documentado puede acarrear tres consecuencias graves:
- Reducción de la indemnización: el seguro solo cubre una parte del valor de los daños.
- Rechazo completo del siniestro: ocurre si no existía sistema automático o si este no estaba homologado.
- Aumento de la prima en renovaciones: incluso cuando la aseguradora paga, puede penalizar el riesgo incrementando los costes futuros.
La ausencia de registros de mantenimiento, el uso de sistemas no certificados o la instalación por empresas no autorizadas son los motivos más comunes de denegación. En ese contexto, invertir en protección certificada no es un gasto, sino una garantía legal y financiera.
Ventajas de contar con sistemas certificados en campanas extractoras
Las ventajas van mucho más allá del cumplimiento normativo:
- Actuación automática en segundos, sin intervención humana.
- Contención del fuego en el punto de origen (campana o freidora).
- Evita propagación por conductos y daños estructurales.
- Disminuye tiempos de inactividad del negocio tras un siniestro.
- Mejora el valor del seguro: algunas aseguradoras aplican descuentos por equipamiento certificado.
- Cumple al 100% el RIPCI y las normas UNE.
Un sistema certificado es, en definitiva, un escudo activo que protege tanto el patrimonio físico como la reputación del negocio hostelero.
Cómo garantizar la aceptación del siniestro ante una aseguradora
Para evitar cualquier tipo de conflicto con la compañía aseguradora en caso de incendio, se deben cumplir cinco pasos esenciales:
- Instalar sistemas certificados y homologados.
- Guardar toda la documentación técnica (certificados, croquis, memoria y facturas).
- Contratar empresas registradas en el RIPCI.
- Realizar mantenimiento anual documentado.
- Registrar la limpieza periódica de filtros, campana y conductos.
Cumpliendo estos puntos, la aseguradora no solo mantendrá la cobertura vigente, sino que reducirá los plazos de peritaje y liquidación en caso de siniestro.
La protección certificada ya no es una opción, es una obligación
En 2025, todas las aseguradoras que cubren cocinas industriales o negocios de hostelería exigen la instalación de sistemas automáticos certificados en campanas extractoras. Esta medida no es un capricho, sino una respuesta técnica ante la elevada siniestralidad del sector.
Contar con una campana industrial con motor, acompañada de un sistema de extinción automática certificado, es la única forma de garantizar seguridad, continuidad operativa y cobertura total del seguro. Cumplir la normativa RIPCI, UNE-EN 16282-7 y UL300 es, hoy, sinónimo de responsabilidad empresarial y prevención efectiva.
Invertir en protección no solo evita sanciones o denegaciones: salva tu negocio y tu tranquilidad.